
Acassuso sacó chapa de campeón
Con los tantos de Rodrigo Alonso y Moramarco, Acassuso derrotó por 2 a 1 a Colegiales, y se perfila para conquistar el campeonato. Barry Skeete había marcado de forma transitoria el gol local. Muy mal arbitraje del señor Luis Álvarez…
Uno no come vidrio. Tal como adelantamos en la previa, imaginábamos que el encuentro sería como lo fue: muy friccionado, trabado, con el uso excesivo de los pelotazos, y con los centros aéreos como principal arma en ataque. Todo este conjunto de acciones, principalmente por el lado de quien más familiarizado está: Acassuso. Sin embargo, uno no creía que ambos jugarían con una vehemencia tan marcada a la hora de hacerse con el control del balón mediante el robo de la misma. De hecho, que uno se vio severamente perjudicado por esta forma de proceder. Claudio Rojas debió ser derivado post partido al sanatorio de Belgrano, como consecuencia de una fuerte contusión que sufrió, en su pie derecho, con un volante rival. Otras de las pruebas que ratifican con la dureza que se fue a la confrontación de cada pelota, está en los once amonestados que hubo, seis por el lado `` Quemero ´´ y cinco por el del `` Tricolor ´´, y asimismo, en los tres expulsados, (Friedrich y Pérez en Acassuso y Barry Skeete en Colegiales). De todas formas, esto no le garantizó al árbitro del encuentro, el señor Luis Álvarez, ganarse el reconocimiento por su aceptable actuación. Por el contrario. Su desempeño no sólo dejó mucho que desear, sino que también dejó su sello impregnado en el resultado. Porque el penal que derivó en el segundo gol de puntero no fue tal, porque la roja a Barry Skeete, quien convirtió a los 20’ de la etapa final transitoriamente el empate, no ameritó mostrarla teniendo en cuenta que la primera de las amarillas fue totalmente exagerada, y porque en todas las infracciones dudosas, `` su mano ´´ siempre indicó tiro libre para la visita. Al margen de todo esto, el resultado tampoco tuvo que ver con lo que los dos equipos impusieron en campo. Si bien no se puede hablar de quien se hizo del control de pelota, dado que esto prácticamente no se vio, fueron los de Miguel Rodríguez quienes inquietaron en mayor cantidad de veces al arco rival. Además, se los vio con más apetito por aferrarse a los tres puntos. Pero pese a ello, el estilo de juego desagradable, pero netamente efectivo que posee Acassuso, pudo más que sus propias intenciones, sus propios deseos.
En definitiva, uno deberá rendirse ante la filosofía futbolística que desempeña `` Ssuso ´´, porque tras esta victoria, aumentó su ventaja sobre sus más inmediatos perseguidos, y sacó a relucir su `` chapa ´´ de campeón. Es más, probablemente lo sea. Hasta aquí, nadie pudo quebrar la estrategia de Felipe De La Riva y sus muchachos. Hasta aquí, los de San Isidro apelaron al uso de todas sus armas y a la insuficiencia de sus rivales para derribarlas. En consecuencia, más allá de las seis finales que restan, uno estima que de no tener que hablar de subversión, Acassuso será el campeón del Apertura.
Post partido, un grupo numeroso de hinchas de Colegiales, fue a increpar a ciertos de sus jugadores. No hubo que lamentar heridos ni nada que se le asemeje por la rapidez con la que intervino la policía. No obstante, alrededor de cinco de los hinchas más distinguidos de la entidad, mantuvo una conversación por espacio de 30’ con el entrenador Miguel Rodríguez y algunos dirigentes. En principio, Rodríguez había vuelto a presentar la renuncia, pero tras finalizar la reunión de la que acabamos de hacer mención, retrotrajo su decisión. Contó con el respaldo, como debía ser, de la dirigencia, y por tal motivo, no dejó su puesto pese a la pobre campaña que están realizando sus dirigidos.
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